Bienvenidx a mi mundo y a mi historia.

Soy Leire, una chica de Bilbao, tengo 26 años que desde pequeña ha estado expuesta ​a realidades muy diferentes, casi 60 países visitados me han hecho ser consciente de como es el mundo a empatizar con las realidades a las que me expongo y a relativizar las cosas.

Me gusta experimentar, viajar y escribir. Soy piscis, eso automáticamente me hace muy sentimental aunque no se me note, lo llevo por dentro, mi color favorito siempre ha sido el rojo pasión, rojo amor. me gusta el amor, aunque siempre se me compliquen las historias, me gusta el marianito los domingos y mi plato favorito siempre será la tortilla de patatas, sin cebolla claro, me sale muy rica. Tengo muchos sueños, por eso nunca me aburro siempre estoy haciendo cosas nuevas, vivo entre dos ciudades, Bilbao y Berlín echo de menos a mi perra Lola, y a mi familia,

siempre soy la que está lejos.

No hay nada que me de mas satisfacción que llenar el google maps de corazoncitos cada vez que descubro otra joyita por alguna ciudad. Me gusta escuchar música todo el rato, me da miedo no recordar cosas, escribir me hace pensar y ver las cosas con perspectiva, aunque mucho de lo que escribo no se lo enseño a nadie, me hace recordar, me hace estar junto a lo que siento, me hace verme como una amiga y acompañarme, sin pretender entenderlo todo.

A veces el mundo me da mucho miedo, creo que el miedo como la pena, es algo que nunca se va, es aceptarlo y hacerlo a pesar de la pena y el miedo.

Te invito a ser parte de mi viaje, y quizás te des cuenta que viajar es mucho más que visitar lugares bonitos, porque con el tiempo me he dado cuenta de que el mundo no necesita a personas inmunes a la realidad que los rodea y que tenemos que profundizar a la hora de entender lo que vemos, en un mundo que cada vez va más rápido y una industria como es la del turismo que cada vez nos aliena y desvincula más, vengo a contarte lo que no te cuenta nadie.

No es un blog de viajes, este es un blog de reflexiones para volver a humanizarnos, te hablaré de sensaciones,  historias, problemáticas sociales, solidaridad, experiencias, lugares y humanidad, de que me enseñan las culturas y sobre todo las personas allá donde voy.

Como siempre dice mi padre, la clave está en admirar, no judgar y empatizar.